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México escogerá un nuevo presidente el domingo, cerrando así una campaña electoral de 90 días durante la cual los medios de comunicación fueron uno de los temas centrales. Organizaciones noticiosas tradicionales han sido fuertemente acusadas de favoritismo político, especialmente Televisa, el grupo mediático en español más grande del mundo. Los siguientes extractos de informaciones publicadas por el diario británico Guardian resumen por qué:
La cadena de televisión más grande de México vendió presuntamente a importantes políticos un tratamiento informativo favorable en sus noticieros y shows principales y usó los mismos programas para desacreditar a un líder de izquierda, según unos documentos vistos por The Guardian.
Los documentos, que consisten en docenas de archivos informáticos, salen a la luz tan sólo unas semanas antes del Proceso Electoral Federal del 1 de julio y coinciden con la aparición de un enérgico movimiento de protesta que acusa a Televisa de manipular la forma en la que cubre las noticias para favorecer al candidato favorito Enrique Peña Nieto.
Una unidad secreta de la cadena de television dominante en México, estableció y financió una campaña para que el candidato favorito, Enrique Peña Nieto, ganase las elecciones presidenciales, según unos documentos vistos por The Guardian y gente familiarizada con el operativo.
Las nuevas revelaciones de la falta de objetividad de Televisa, la cadena de medios más grande del mundo en lengua española, cuestionan la afirmación de ser polítcamente imparciales hecha por la compañía así como la insistencia de Peña Nieto de no haberse beneficiado de una relación especial con Televisa.
Este escándalo y sus consecuencias han motivado, incluso, que algunas personas hablen de la “Primavera Méxicana”, por la influencia de las redes sociales y las organizaciones civiles. (Para más antecendentes, lean sobre Yo Soy 132, un movimiento que empezó con este video y con este tuit).
La pérdida de confianza en los medios tradicionales genera nuevas oportunidades para competir: nuevos medios, nuevas voces, nuevos enfoques. Y es eso lo que ha pasado en México, donde una generación de organizaciones noticiosas exclusivamente digitales han cambiando la forma en que –al menos- algunos mexicanos se han informado acerca del proceso electoral.
“La principal contribución de los medios digitales es que se han atrevido a realizar una cobertura diferente: más reporteo de profundidad y de investigación, y también son más rápidos y flexibles para actualizar las noticias”, me dijo Gabriela Warkentin, académica en Comunicaciones de la Universidad Iberoamericana.
El alcance y la proyección de esta nueva generación digital ni siquiera se acercan a las que tiene Televisa, aclaró Warkentin (menos de una tercera parte de los 111 millones de ciudadanos en México tienen acceso a Internet). Sin embargo, el impacto ha sido mayor cuando se trata de cubrir temas que otros medios no toman en cuenta. “Han dado mucho más información y análisis (que los medios tradicionales), lo que al final puede ayudar a los electores en su proceso de decisión de cómo votar, y eso no es menor cosa”, aseguró.
Como ocurrió en Estados Unidos durante los comienzos de la “blogosfera”, el número de usuarios de la web en México puede ser pequeño comparado con el de los medios tradicionales, pero esos lectores son muchos más activos e influyentes cuando de temas políticos se trata. También son más jóvenes, un grupo que puede ser decisivo en esta elección.
Animal Político, ADN Político y el sitio de noticias SinEmbargo.com son las jugadores más prominentes en el escenario mediático digital de México. Todos aparecieron en los últimos 18 meses y ya reportan audiencias entre los 900.000 y 1.3 millones de visitantes únicos por mes. (Para contextualizar, el sitio de noticias más visitado en México registra 2.2 millones de visitantes únicos por mes).
Los editores de estos tres sitios coinciden en que hay una gran demanda de una cobertura política más focalizada en los intereses de las audiencias, que en los deseos de los políticos.
“Los medios de comunicación tradicionales en México han perdido credibilidad, y portales como el nuestro han marcado una diferencia,” aseveró Alberto Bello, director editorial de ADN Político. Su sitio produce contenido original pero también agrega contenido generado por otras publicaciones de Grupo Expansión, un conglomerado mediático propiedad de Time Warner y al que pertenece ADN Político.
“Hay periódicos donde el periodismo no es la prioridad porque ellos no dependen de sus lectores. La escandalosa mayoría de los periódicos viven de recursos públicos”, me dijo Daniel Moreno, el editor de Animal Político.
Animal Político, SinEmbargo.com, y ADN Político están financiados por inversionistas que, aseguran ellos, no tienen vínculos con ningún partido político y que creen en que la independencia editorial debe ser la base de su negocio. “Si un politico quiere dictarnos el contenido a cambio de darnos publicidad, nosotros no queremos su publicidad. Ser independientes editorialmente puede tener consequencias económicas inmediatas, pero asegura sostenibilidad a largo plazo”, agregó Bello.
“Generar ingresos es un tema muy importante y una gran preocupación para los medios digitales”, aseguró Warkentin.
Ninguno de los tres medios proporcionó detalles sobre el monto de la inversión con la que arrancaron los proyectos, pero los tres aseguraron que cuentan con apoyo económico de sus inversionistas hasta que alcancen el “punto de equilibrio” financiero. En el caso de Animal Político y SinEmbargo.com, eso será “pronto”, de acuerdo con sus editores, mientras que ADN Político estima que terminará el año sin pérdidas económicas.
“Somos optimistas de que Animal Político tendrá una larga vida”, dijo Moreno. Daniel Eilemberg, presidente de Elephant Publishing, la compañía que respalda Animal Político (y que está ubicada en Miami, Florida), reconoce que la inversión en publicidad online en México todavía está dando sus primeros pasos. Aclaró, eso sí, que está creciendo rápidamente. (IAB México reportó que la inversión publicitaria online alcanzará $500 millones este año, lo cual significa un aumento de 33 por ciento en comparación con el año pasado. Los mayores anunciantes son la industria automotriz y financiera).
El impacto de los medios digitales no es reconocidos por todos en México. Guillermo Osorno, un experimentado periodista, director de la revista Gatopardo y columnista del diario El Universal, dice que “la cobertura digital ha adquirido más importancia durante esta campaña, pero no diría que los periodistas están marcando una diferencia en la Internet”.
Leon Krauze, otro periodista mexicano, pero radicado en Estados Unidos, y columnista de SinEmbargo.com, manifestó que los nuevos medios están dirigidos por reconocidos periodistas con amplia experiencia en radio y televisión. “Yo no creo que haya un periodismo digital innovador en México”, dijo. Sin embargo, él agregó que la mera presencia de más medios es refrescante. “Es el principio de un fenómeno que está aquí para quedarse”.
Animal Político, SinEmbargo.com y ADN Político han tratado de innovar a su manera. A continuación, una serie de ejemplos:
Con el día de elecciones a la vuelta de la esquina, los tres sitios están concentrados en dar la mejor cobertura el domingo. Sin embargo, el mayor reto empezará el lunes, cuando tengan que pensar en cómo responder a la misma pregunta que se hacen los sitios de cobertura política en Estados Unidos: ¿Cómo mantenemos el interés –y los ingresos económicos- una vez que termine el ciclo electoral? Eilemberg de Animal Político dice que espera expandirse de nuevas maneras, como organizando eventos y “sindicalizando” el contenido.
“Es por eso que también estamos pensando en diversificar nuestras fuentes de ingresos”, concluyó.
Fotografía de Andrés Manuel López Obrador en una actividad de campaña por Rosa Menkman y fotografía de un graffiti anti-PRI por Randal Sheppard utilizadas bajo una licencia Creative Commons.